Lydia || The rose {ID}

Psicología

Fue educada con las bases de una moral estricta y la religión impuesta por su familia estuvo siempre presente, por ello durante su adolescencia acostumbraba ser la chica con expresión reflexiva, dado a su costumbre por analizarlo todo; se mostraba distante, reservada y tímida, no por sentir miedo del exterior, lugar que su padre continuamente le describa como “aterrador” para una joven dulce como ella. Lydia temía mas bien a sí misma, a sus pensamientos que contradecían todo aquello que le fue enseñado, las chicas de su edad salían con chicos, iban a fiestas donde no existía supervisión paterna, algunas fumaban y bebía sustancias ilegales, su padre jamas le permitiría ser parte de todo eso, en su interior sintió culpa por sentir la más mínima curiosidad. Cuando se sentía perdida acudía a su abuelo, él siempre la tranquiliza y disipa sus dudas, en una ocasión el anciano le dijo algo que jamas hubiese imaginado que saldría de esa boca “vive tu vida, por ti” solo esa frase disipo todos sus temores y lavo su vergüenza.

Actualmente Lydia es una joven activa, afectuosa y poseedora de gracia natural, le gusta agradar a los demás por eso no teme ser infantil si eso logra poner una sonrisa en un rostro triste. Aunque da la impresión de ser dulce e inocente, hace falta darle otra mirada desde un punto totalmente diferente pues la joven Lydia puede llegar a tener un carácter agresivo, obstinado y como algunos han llegado a describir, estúpidamente valiente, pues nunca se da por vencida metiéndose en las situaciones menos favorables con el fin de demostrar un punto; ella es leal, audaz y quizás presiona demasiado en algunas ocasiones, pero es porque le resulta desesperante cuando se encuentra con alguien que no es consciente de sí mismo, de lo que puede llegar a lograr si tan solo lo intenta. No tolera la injusticia y susceptible como es ella probablemente el infierno se desate si no hay alguien cerca para controlar su carácter explosivo.

HISTORIA

Lydia es la hija del doctor Samuel Ostroff, un hombre judío quien se casó con una mujer de raíces francesas dueña de una tienda de antigüedades; la pareja ha vivido en feliz matrimonio desde entonces y han criado a sus hijos dentro del entorno familiar sólido, amoroso y con una visión estricta hacia los buenos valores. Lydia es nieta de un rabino, tuvo una educación judía, los recuerdos de su infancia están plagados con imágenes del templo donde su abuelo lee las antiguas escrituras, aun hoy en día. También se recuerda jugando dentro de los pasillos del centro Ostroff, una institución dedicada a dar tratamiento para diversos males, asociados comúnmente a la mente. El centro ha sido de su familia durante varios años, la dirección fue pasada de su tío abuelo a su padre, quien planea cederla a Lydia en algunos años, pues ha sido ella quien se ha decidido por la carrera de psicologia. Desde pequeña mostro talento para la profesión; acostumbraba platicar con los pacientes durante horas, conversaciones que mantuvo siempre en secreto, incluso de su padre dejando al personal sorprendido por la madurez con la que la niña llevaba temas, no precisamente aptos para su edad. Sin embargo Lydia creció conservando una personalidad alegre, sociable y su profunda fe en bien mayor.

Proviene de una gran familia, en su mayoría personas destacables y talentosas. Los padres de Lydia le otorgaron una calidad de vida por encima del promedio, nunca fue caprichosa pero siempre obtuvo cuanto necesitara, asistió a colegios femeninos prestigiosos y eligió ingresar a la NYU como su padre en el pasado, ellos tienen una excelente relación que acostumbra volverse turbia cuando los deseos de uno no coinciden con el del otro. Lydia quiere crecer por sí misma y no simplemente colgarse del apellido familiar, pero su padre insiste en protegerla de los peligros del mundo encerrándola dentro del calor del círculo familiar. Su última discusión fue acerca del sitio donde Lydia realizaría su labor social, el señor Ostroff insistió en que ella realizara este dentro del centro familiar, pero en un acto de rebeldía Lydia solicito un puesto en St. Jude como consejera estudiantil, teniendo tan solo 20 años fue su excelencia académica mezclada un poco con el pedigrí que la complementa lo que le abrió las puertas a un mundo al que considera fuera del control de su padre.

INFORMACIÓN EXTRA

~Tiene un gato blanco, en realidad no es suyo simplemente se ah convertido en un compañero que aparece repentinamente en su habitación.
~Tiene adicción por los productos azucarados.
~Carga siempre con una cámara, le gusta fotografiar y ser fotografiada.
~Le encantan los videojuegos y las películas de suspenso.
~Es poco organizada y pierde las cosas con mucha facilidad.
~Algo que le gusta también es la comida picante.
~De niña tomo clases de danza, no poseía gran talento pero tampoco le gustaba demasiado, su talento mas bien radica en el dibujo.